domingo, 15 de agosto de 2010

Cita 9

Arranqué la semana con mal humor. Mucho mal humor. Estaba con Santiago yendo a buscar a Yanina a teatro. Había empezado durante la semana. Mientras la esperabamos en la puerta...

- Yo no puedo creerlo todavía - Le digo a Santi - Pensé que había sido un malentendido y listo. Pero un juicio?! se fue al carajo. Vos qué opinás?

No me contesta.

- Santiago! - Le grito para que reaccione.

- Qué?... sí, sí... obvio.

- Sí qué?

- Que sí.

- Sí?

- Y sí?

- En serio te parece que tengo que comprarme otra compu?

- Te estoy diciendo que si!

- Ves boludo? no me estabas escuchando, no te estaba hablando de eso.

- Ah, perdón. Yo tampoco ando bien.

- Qué pasa?

- No importa, dale, contame vos.

- Bueno, nada. Te acordás de Katakana?

- A ver, dejame ver...

Santiago saca una libreta. En la tapa dice "Las Crónicas de las primeras citas de Mariano Ricardi".

- Qué es eso? - Le pregunto.

- Un bloc de notas.

- Si ya sé chistoso.

- Y para qué preguntas cosas obvias?

- Me refiero a qué tenés ahí escrito!

- Ah, es un proyecto en el que estoy trabajando, voy anotando todas las malas experiencias que vas teniendo. Katakana fue tu cita número 6. Única japonesa con tetas y rulos, simpática, te cagó a piñas.

- Bueno, me inició juicio! me llamó mi vieja esta mañana y me dijo que va a presentar acciones legales por acoso.

- Acoso?

- Si! está loca. Bienvenida a la Argentina Katakana. Acá todos van a querer tener sexo con vos.

- Y qué vas a hacer Mariano?

- Supongo que buscarme a una abogada. No tengo muchas chances.

Yanina sale de teatro con una amiga. Se acerca para saludarnos.

- Hola Chicos! Jaz, ellos son Mariano y Santiago. Mis mejores amigos desde la secu - Saluda amablemente Yani.

Luego de presentarnos con "Jaz", ella se fue y Yani se quedo con nosotros mientras caminábamos para el bar de siempre.

- Qué pasa con esas caras largas? - Pregunta preocupada Yanina.

- Me va a hacer un juicio la china! - Le digo re caliente.

- Japonesa - Me corrige Santiago chequeando en su libreta.

- China, japonesa, koreana. No sé distinguirlos!

Le cuento a Yanina del problema legal y me pasó el número de una abogada que conoce su madre que la había ayudado con el tema del divorcio. Los papás de Yanina están separados, claro.

Una vez en el bar:

- Todavía no me olvido de Helena...

- Salís con distintas mujeres cada 2 semanas, ya se te va a pasar - Me dice Yani.

- No, no es eso. Me dijo que vea a una sexóloga. No puedo dejar de pensar en eso que me dijo.

- Si tanto te preocupa. Por qué no ves a una? Yo conozco varias. - Dice Santiago mientras mira qué pedirse. Al pedo porque siempre toma un café.

- Y de dónde conoces "varias" sexólogas?

- Digamos que en la facu me las cruzo siempre. La psicología y sexología son hermanas.

- Bueno, tenés algún número ahora para pasarme?

Me pasó el celular de Irina, así se llama la sexóloga. Cuando hablé, noté que tenía una voz muy seductora. Como si fuese una telemarketer, pero exitósa.
Arreglamos un encuentro en su consultorio, su casa. Y justo el viernes 7 de Mayo, el día de mi cita número 9, con la sexóloga Irina:

5 minutos antes. Obvio, la cabala. Toco el timbre del edificio y nuevamente esa voz seductora. Me toca el timbre y subo directamente. Una vez en su departamento, sonaba música relajante, habían muchísimas alfombras, almohadones de todos los tamaños y colores, velas, lociones, luces ténues.
Irina estaba vestida con una túnica y parecía tan relajada. Y claro, no tiene problemas de sexo. Yo sabía que la gente que anda nerviosa o tensa, no es de tener mucho sexo, o si lo tiene, es pésimo.

- Vení... sentate acá - Me dice Irina tan tranquila...

- Hola, permiso.

- Empezamos?

- Bueno.

- Primero, qué te preocupa?

- Y, la verdad que son varias cosas ahora que lo pienso. Digo, cómo se que el sexo que tuve en mi vida es bueno? me aguanto lo suficiente? me habrán fingido el orgasmo? en qué momento deciden fingirlo? seré un buen amante? son preguntas que me matan...

- Está bien, es común.

- Por ejemplo... No sé. En mi vida he tenido sexo con distintas personas y con algunas no duré ni 5 minutos.

- Eso no es un problema. Pensar en eso sí. Yo te voy a contar algo... uno cuando realmente dura, es porque no sólo está teniendo sexo, sino que está haciendole el amor a la persona que ama. Entendés la gran diferencia?

- Si...

- Yo no creo que cuando hayas hecho el amor con tu pareja hayas tenido ese problema. Verdad?

- No, es verdad.

- Entonces... ese no es un tema. El hombre cuando tiene sexo con gente con la que no comparte amor, siente que lo único que tiene que hacer es acabar. El sexo es como hacer fila, un tramite bancario, un bajón. El hombre no quiere tener sexo, sólo quiere acabar.

- Claro, nunca lo vi así. Es verdad.

- También obviamente está la cuestión de saber cómo hacer el amor, pero si realmente tenés una unión con esa persona, te sale por arte de magia. No es practicando ni nada, creeme. De hecho, te voy a decir algo sobre el sexo que es tan básico pero pocos saben.

- A ver, qué?

- Hacer el amor con tu pareja no se trata de descargar energía, terminar cansado y haber complacido tus necesidades y la de tu pareja. La idea de hacer el amor es juntar ambos cuerpos para cargar energía, transmitirse ambos la energía vital que tienen para durar así mucho más y disfrutar cada penetración. No sólo el acabar.

- Claro.

La verdad que me quedé impactado. Nunca lo vi así. Primero se me vino a la cabeza Wanda y las veces con las que estuve con ella. Tal vez ese fue uno de mis tantos errores, el sexo. Es tan importante en la pareja, pero ahora entiendo bien el por qué. Se trata de recibir energía, no de descargar! Voy aprendiendo de a poco. Con 25 años, soltero, de a poco. Sexo = cargar energía. Ok?
Después con Irina hablamos de diversas cosas. En un momento se ofreció a hacerme un masaje exótico para despejar un poco mi mente... El tema es que... el masaje... era... ya saben. No era en la espalda, o en el cuello. Sí, era en mi miembro.
Yo estaba nervioso. Ella me decía que me calme. Pero no sabía hasta qué púnto este encuentro era profesional o si arrancarle la túnica a mordiscos y cargar energía con ella entre sus almohadones!
Pero pensé "es sexóloga, no tiene la necesidad de acostarse conmigo. O se trata de eso?". En fin, no paraba de pensar en tener sexo con Irina, y ella se da cuenta de eso, obvio. Sobre todo cuando con el masaje, el pequeño se levantó de la siesta. Entienden a lo que voy?

- Mmm - dice Irina con una voz seductora. Andá a la puta madre! - estás muy tenso me parece. Tal vez esto te ayude...

Irina comienza a... usar su boca... Ok, no sé por qué trato de ser sutíl. Me empezó a hacer un buche. Y bueno, nada, estuvimos cargando energía un buen rato después.
Pero fue probablemente el sexo más incómodo que tuve en mi vida. Todo lo que hacía lo hacía filtrando mis pensamientos:

"Es sexóloga, no le doy un orgasmo ni a palos"

"Me va a dejar de cama"

"Fija que hago todo mal"

Y así fue, empecé a hacer cualquier cosa otra vez. No la paso bien teniendo sexo! entendés? es un problemón enorme. No puedo tener relaciones con una persona que no es la que quiera. La verdad que me siento un pelotudo. No sé ni distinguir un chino de un japonés y voy a saber cómo mantener un buen sexo y "cargar energía"?
Y no pasó sólo eso mientras tenía sexo con Irina. Sino que me daba indicaciones constantemente, pero constantemente, desde "pone la mano acá", "así no", "eso a nadie le gusta" o "la pierna de este lado" y millones de cosas más, que, si bien son muy comunes en parejas, que te lo diga una profesional suena a que sos un perdedor absoluto.

Una vez que terminamos. Bah, que yo terminé:

- Irina, vos siempre haces esto?

- Qué cosa? - me dice mientras prende un sahumerio.

- Tener sexo con tus "pacientes".

- Ah, mmm, depende. A veces sí, a veces no. Bueno, ya terminó la sesión.

- Ok. Cuánto te debo? 100?

- 300 pesos.

- Eh? Pero no era 100? o por ahí?

- Sí, pero sin sexo es eso.

- Ah o sea que por tener sexo con vos me va a salir 300 mangos!

- Y sí, acabás de tener sexo con una sexóloga!

- Y no lo disfruté!

- Bueno papi, lo siento. Me podés dar la guita?

Le pago y me voy. Preguntándome cosas sobre Wanda... Y también preguntandome si fui a una sexóloga o a una prostituta? Le pagué a una sexóloga por tener sexo?!?! Qué caradura. Ella me tendría que pagar a mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario